Fui a París (y estuve allí más días de los que viajé)
Llevaba años diciendo que tenía que ir al Louvre, pero no hacía nada por cumplirlo. Lo decía como esperando a que llegase el momento adecuado, pero estos momentos en realidad nunca llegan. Como dijo un gran cientéfico, "las cosas no se hacen solas, las cosas hay que hacerlas".
Llevaba años diciendo que tenía que ir al Louvre, así que cuando me planteé qué me impedía hacerlo y la respuesta fue "nada"*, busqué un momento en el que tuviera poca carga de estudio y empecé a planear el viaje. Y hoy puedo decir:
He ido al Louvre.
He ido a París.
El viaje empezó mucho antes de subir al primer autobús (ha sido un viaje muy largo con muchas escalas y conexiones). Y he disfrutado de cada momento de él.
*Cuando me puse a organizarlo, descubrí que había muchas cosas que me lo impedían: sobre todo, las conexiones horribles con el exterior que tenemos en Galicia que me obligaban a hacer más de un trasbordo y el precio en general del transporte. Pero tiré hacia adelante de todas maneras.
No podía permitirme ir demasiados días a París. Tenía que aprovechar el tiempo lo máximo posible. Y en parte por eso es por qué he pasado tantos días mentalmente en París, en el Louvre, en el Museé D'Orsay y en Notre Dame. He organizado y disfrutado del viaje de una manera curiosa y por el camino he descubierto un montón de recursos para conocer esos sitios y sus obras de arte. Por eso me parecía interesante dejar todo reflejado y recogido en el blog: eso es esta entrada.
1. De lo que me ocupé yo: el plan
Ya que iba a ser un viaje corto, tenía que condensar la visita todo lo que pudiese; pero intentando encontrar un equilibrio con no morir de estrés. No tenía presupuesto para estar alojada y comiendo fuera demasiados días, ni la oposición me iba a dejar irme muchos días de los apuntes. Decidí que lo más sensato sería llegar el jueves al mediodía e irse el domingo muy temprano, para llegar a casa el lunes.
Eso me daba dos días y medio para ver una ciudad con una cantidad inconmensurable de museos y lugares históricos. Tenía que llevar planeado qué quería hacer y qué iba a ver, porque no tenía apenas margen para la improvisación.
Me pareció lógico empezar a investigar lo que más me interesaba de la ciudad antes de llegar a ella. No iba a tener tres horas por la mañana para investigar a qué museo ir por la tarde o qué podría encontrar en cada edificio.
El objetivo principal era el Museo del Louvre, y tenía claro que necesitaba una mañana entera para dedicársela a él. Luego, investigué qué había en la ciudad y establecí prioridades de qué me interesaba ver.
Sabía que Notre Dame, recién abierta, era una necesidad. Luego el amigo con quien viajé sugirió el Museé D'Orsay. Poco después me recordaron que existía la Torre Eiffel. Descubrí el museo de L'Orangerie, el Sacre Coeur, el Museo Cluny, el museo Delacroix, Saint-Chapelle, el Petit Palais, el Panteón, las catacumbas y los cementerios, las galerías... y muchos más sitios que no era posible visitar en tan pocos días.
Decidimos qué queríamos ver y una vez eso estuvo definido (aunque luego hubo imprevistos como la muerte del Papa que alteraron el plan inicial), empecé a profundizar en ellos.
2.Notre Dame
Me gustan mucho las catedrales, como obras arquitectónicas más que como lugares religiosos. Me parece alucinante que esos edificios lleven en pie cientos de años (algunas más de 1000) y dentro son capaces de crear atmósferas únicas. Aprovechando que está recién restaurada y abierta, decidí descubrir qué podía encontrar en Notre Dame.
Lo primero que me interesó es la estructura de la catedral. Tuve muchísima suerte y encontré este documental de Superestructuras Antiguas sobre la catedral: estructura, pesos, innovaciones técnicas, evolución de la construcción a lo largo de los siglos, la restauración de Viollet-le-Duc, el incendio de 2019 y su reconstrucción. Tenía todo lo que quería saber en 52 minutos, de manera clara, rigurosa y entretenida. Dice RTVE que estará disponible hasta el 31 de octubre de 2025: Notre Dame de Paris. Construida para sobrevivir.
Quise profundizar un poco en el incendio y el proceso de restauración, porque, la verdad, vi el incendio en la televisión cuando ocurrió y me olvidé de él hasta que anunciaron su reapertura. Este reportaje de RTVE me pareció muy útil: Cronología del incendio de Notre Dame y la reconstrucción hasta su reapertura.
Lo de la estructura y arquitectura de la catedral lo tenía ya claro; me faltaba toda la parte simbólica del templo. Aquí recurrí a youtube y encontré varios vídeos muy útiles:
-The medieval secrets of Notre Dame, otro documental. En este caso mezcla historia, religión, simbología de los elementos de la catedral, construcción, contexto, el órgano... un poco de todo.
-París (en el corazón de Notre Dame) (una grabación de un documental emitido en La 2) Es previo al incendio, pero se centra en aspectos religiosos y de gestión real del edificio que me parecieron muy curiosos.
-Gárgolas y quimeras: un vídeo hecho pensando en estudiantes de secundaria pero que me pareció muy útil, por sencillo y claro. Diferencia entre los diferentes tipos de esculturas, qué función tienen y años en los que se instalaron. Me dan muchísima curiosidad las quimeras y ojalá hubiera estado abierto el recorrido por las partes altas de la catedral para ir a verlas de cerca; pero todavía están en obras y no permiten subir.
Además, menciona algo muy relevante: Notre Dame en el siglo XIX estaba en ruinas y se planteó su demolición. Así que Victor Hugo, para darle gloria a la catedral, escribió Notre Dame de París. La novela gustó tantísimo que la gente pidió que no se demoliera. De ahí surgió la gran restauración de esos años, encargada a Viollet-le-Duc.
La novela son unas 700 páginas en su edición en castellano y no iba a leerla, pero ya que estaba, dos días antes de salir de viaje, aproveché para ver la película de Disney, El jorobado de Notre Dame. Quise fijarme sobre todo en cómo trata la arquitectura y los espacios internos de la catedral, pero es una película muy centrada en los personajes y el argumento. La catedral apenas tiene más presentación que servir de refugio y protección a los personajes que lo necesitan. Apenas pasan por un par de escenarios dentro del edificio.
Cuando ya había terminado con Notre Dame, descubrí el canal de The museum guide: una guía que hace recorridos por diferentes lugares con valor artístico y va explicando las obras. De Notre Dame tenía la perspectiva arquitectónica, la perspectiva religiosa y me faltaba la artística. En su visita en la reapertura habla de esto: Rebirth of Notre Dame cathedral.
Cuando estaba buscando información sobre Notre Dame surgió Saint-Chapelle, una capilla que está muy cerca de la catedral, espectacularmente bonita. Este vídeo de Manuel Bravo la muestra y cuenta un poco de su historia. Al final no pudimos entrar porque cierra muy temprano y cuando llegamos hacía tiempo que no podía entrar nadie más. Tendréis que disculpar el título clickbait del vídeo: The most impressive church in Paris (not Notre Dame)
3.Musée D'orsay
Otra de las paradas tenía que ser el Museé D'Orsay, que tienen una enorme colección de arte impresionista y postimpresionista. Nunca fui fan de la printura francesa, pero las vanguardias me encantan y toda la concepción actual que tenemos del arte empieza con ellos.
Mi gran guía para saber qué iba a encontrar dentro del museo fue, de nuevo The museum guide. Tiene una serie buenísima sobre las pinturas (y alguna escultura) de este museo que, si bien parece muy extenso porque está dividido en tres partes, son vídeos de una duración perfectamente manejable. Hace un recorrido que parece que está propuesto por el propio museo: empieza en la planta baja, con los precursores del impresionismo; sigue subiendo pisos hacia el impresionismo en sí, para terminar con las vanguardias más disruptivas y originales. Por el camino se encuentra con Manet, Delacroix, Millet, Monet, Van Gogh, Degas, Gaugin... casi nada. The Musée d'Orsay Tour: Part 1 - The Surprisingly Scandalous Rise of ImpressionismNo busqué muchas más referencias sobre el Museé D'Orsay porque lo que más he estudiado de teoría del arte es justamente sobre las vanguardias, y necesitaba pocos apoyos para entender qué tienen de especial los Nenúfares de Monet, Las segadoras de Millet, o, bueno, Van Gogh más allá de ser un icono de la cultura popular.
4.Otras vanguardias artísticas en París
Esto me guio a un pozo más profundo en el que me sumergí que luego no llevó a nada.
Como decía, el grueso de lo que he estudiado de teoría de movimientos artísticos son las vanguardias. Concretamente, los artistas vanguardistas latinoamericanos en París durante el siglo XX. Me centré sobre todo en la literatura (tanto poesía como narrativa), pero como convivían artistas de todas las disciplinas, la teoría que se aplica a la pintura también vale para la poesía, por ejemplo.
Mirando el mapa de París vi que a uno de los barrios le llaman "barrio latino" y durante un par de días di por supuesto que se refería a los artistas desplazados de Sudamérica que escribieron y vivieron en París hace apenas un siglo. Me equivocaba, y el barrio latino se llama así porque ahí está la Universidad y por lo tanto es donde se hablaba latín; nada que ver con los movimientos artísticos.
Pero la caja de los recuerdos había sido abierta. Al final no tuve tiempo de buscar las casas de esta gente, pero sí pude buscar material sobre los años y la literatura de Cortázar en París.
Rutas sobre el París de Cortázar hay varias. Este pequeño reportaje de Página Dos es muy chulo; este itinerario de National Geographic entra en algo más de detalle y ya lo último es este documento del Instituto Cervantes. Las tres tratan el mismo tema, y los tres destacan diferentes lugares y acontecimientos.
Son los tres muy curiosos, pero no llegan a dónde yo quería: qué más artistas vivían en París y formaban parte de las tertulias y grupos creativos. El inicio de este texto (Vanguardias europeas, españolas e hispanoamericanas) me daba algo de contexto y me recordaba algunos de los nombres, aunque luego se centra en los españoles en España y no era lo que buscaba. Este otro, Movimientos vanguardistas en Hispaoamérica es más profundo y más completo, y aunque me gustó y me pareció muy completo, tampoco entraba en lo que más me interesaba.
Al final no encontré nada que me ayudase realmente con lo que quería descubrir. De todas maneras, no iba a tener impacto en la visita más que conocer dos o tres anécdotas. Así que lo dejé de lado.
Pero sí quise leer algún texto de Cortázar ambientado en París; Rayuela se desarrolla en la ciudad pero se extendía mucho más de lo que quería leer, así que recurrí a los relatos cortos. "Manuscrito hallado en un bolsillo" se desarrolla dentro del metro, y "El otro cielo" dentro de una de las galerías que quería visitar. Son dos relatos, vamos a decir que los leí y vamos a dejarlo ahí.
5.El Museo del Louvre
Y por fin, el Louvre.
Sabía que era un museo difícil de abarcar, y que tendríamos que decidir qué dejar de ver. Por muchas horas que echásemos dentro, no hay manera humana de verlo todo.
Intenté
consultar los mapas que hay en la web sobre las alas, las salas y dónde
está cada obra, pero no me quedó muy claro. A los pocos días de
decidir hacer este viaje, Macron anunció que harían grandes reformas en
el museo y cuando fuimos, toda el ala dedicado a la pintura española
estaba cerrada. Es lo único que conseguí averiguar en un primer momento.
Me
parecía un poco sacrílego buscar vídeos de youtube sobre qué obras no
nos podíamos perder en el Louvre. Una vez Instagram me sugirió un reel
que se titulaba "Cómo ver el Louvre de una manera rápida y eficiente" y
me sentí físicamente mal. Pero tampoco me parecía que tuviese mucho
sentido ir a ciegas y esperar encontrarnos con las obras que conocíamos,
para salir y descubrir que, por ejemplo, nos habíamos dejado el Código
de Hamurabi atrás.
De
nuevo, recurrí a The museum guide. Tiene varios vídeos sobre el Louvre,
como no podía ser de otra manera. Este que habla de 10 piezas
importantes en las colecciones me orientó: The top ten treasures in the Louvre. Este de pinturas me gustó mucho,
pero al final pasamos muy poco tiempo en la zona de pinturas y no vi
casi ninguna de ellas: The 20 most famous paintings in the Louvre. Después de que, según Spotify Wrapped, mi música
más escuchada de 2023 fuese el musical Six, me hubiera gustado ver el
famoso retrato de Ana de Cléveris,
pero pasamos más tiempo en el ala de antigüedades egipcias y griegas.
Lo
bueno (o lo malo) del Louvre es que es tan basto que da igual cuantos
artículos leas, todo el mundo te va a recomendar diferentes obras y
recorridos. Consulté los listados de diferentes webs y blogs dedicados
al SEO, que están de acuerdo en muy pocas piezas. Por ejemplo, los de
Viajeros Callejeros o de Confirmado.
Luego pensé que, sabiendo como sabe el museo explotar la publicidad, tendrían recorridos destacados o al menos una lista de imprescindibles para guiar a los visitantes hacia lo "importante". No me equivocaba, y tienen varios recorridos recomendados. Me dejé guardado el recorrido Obras maestras porque me dejaba en tres pasos en la Victoria de Samotracia, pero cuando entramos fuimos por otra puerta y nos lo saltamos. Sí me ayudó a encontrar las Cariátides dentro del museo: están justo al otro lado de la pared de la Venus de Milo; pero para poco más (aunque es un buen recorrido y está muy bien explicado).
Una de esas webs alimentadas de SEO enseñaba los toros alados asirios, y me quedé embobada con ellos. Quise descubrir más de qué iban, de dónde venían y qué eran, así que terminé buscando también información sobre arte mesopotámico. Aquí una introducción al arte mesopotámico que me pareció bastante orientada a las clases de historia del arte de bachillerato (no lo digo como algo negativo) y aquí otro vídeo más divulgativo, más extenso y con más detalles: Mesopotamia, el arte de las primeras civilizaciones de la historia.
Poco
más me quedaba por saber del Louvre, o al menos según creía que
necesitaba. Hasta que, como siempre me pasa demasiado tarde, caí en lo
obvio: en el Louvre está la Mona Lisa.
Buscar información sobre el cuadro me parecía complicado, sobre todo porque al ser tan famoso y tan icónico hay muchísimas interpretaciones erróneas, información inexacta, e incluso teorías de la conspiración a su alrededor.**
Me
gustó mucho este episodio del podcast Art History for All: For the love of Mona Lisa. Le da
contexto a la creación y a la historia del cuadro, sin meterse en hipótesis fantasiosas. Cómo se pintó, por qué se pintó, por qué
manos pasó, cómo terminó siendo el cuadro más famoso de la historia.
Sencillo, concreto, documentado: perfecto.
Mi siguiente tren de pensamiento fue: quizás la Mona Lisa original tenga mucha leyenda a su alrededor. Ojalá tuviera una hermana gemela menos importante de la que hayan hablado solo expertos muy interesados en ella. Y mira por dónde, el Prado tiene una copia de la Mona Lisa y además un equipo de comunicación buenísimo. Este vídeo sobre cómo descubrieron la historia de la copia permite acercarse a la Mona Lisa original como ningún vídeo sobre ella lo hubiera hecho. Y ya para rizar el rizo, esta ponencia sobre la copia habla, además de ella, de muchos otros cuadros de Da Vinci, sobre cómo era su proceso, cómo se trabajaba en sus talleres y de muchas otras copias de otros muchos cuadros.
**Muestra de lo fatal que está el tema con la Mona Lisa son los comentarios a estos dos últimos vídeos: son vídeos oficiales del Museo del Prado, explicados por la directora de la investigación, miembro del Gabinete de Documentación, en los que explica sus descubrimientos y sus procesos. Y en los comentarios hay un montón de gente intentando corregirle diciendo que el retrato no es de quien se cree que es, que el cuadro no representa lo que ella dice y un montón de mentiras más.
En un arranque de locura final, horas antes de salir para París, recordé que El código da Vinci se desarrolla en parte en el museo del Louvre. No me planteé leerlo entero, pero sí recuerdo que tiene un par de escenas relacionadas con La virgen de las rocas y quise escucharlas un audiolibro. Por el bien de todos supe frenarme a tiempo. A veces hay que saber cuándo parar. (Cuando volví intenté buscar el audiolibro oficial y no lo encontré. No descarto hacerlo próximamente, pero de momento no he podido).
6.Otros
También investigué otras cosas menores: dónde encontrar los mejores croissants, qué precio esperar por los macarons, tiendas de lanas que valiese la pena visitar, dónde comer en cada una de las zonas, sitios bonitos para hacer fotos y un montón de otras cosas no artísticas y mucho más fugaces que creo que no vale la pena añadir aquí. ¿Dónde sí lo añadí? En un mapa que usamos para movernos por allí. Lo comparto aunque advierto que el último cambio es del 15 de abril de 2025 y desde entonces está abandonado. No puedo prometer que cuando lo consultéis en un futuro sigan existiendo todos los negocios que están apuntados.
Ha sido una entrada larga, con un montón de enlaces y recursos. Pero también ha sido un mes y pico intenso, que he disfrutado al máximo encontrando y absorbiendo toda esta información. He aprendido muchísimas cosas y he disfrutado como una enana dejándome llevar de obra de arte en obra de arte, deteniéndome en lo que me interesaba y obviando lo que no me iba a llevar a ningún sitio.
No me gusta viajar. Me agobia depender de los horarios del transporte, no me gustan las aglomeraciones de gente, me limita llevar un horario para hacer cosas y sufro en las colas. Pero este viaje sí me ha gustado. Y me ha gustado mucho por poder hacerlo así.
Espero que entendáis a qué me refiero con "estuve en París muchos más días de los que viajé".
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